
Un ligero descenso nos llevará a la caseta ubicada en O Cubillar del Barranco, un lugar apropiado para tomar un pequeño respiro y reponer algo de fuerzas antes de continuar con el ascenso. Todavía seguiremos el sendero con las marcas del GR, hasta un lugar donde nos cruzaremos con un abrevadero, en este punto giraremos hacia la izquierda y seguiremos los hitos que nos conducirán primero a As Planas y luego a la Brecha de Aspe. En esta zona hay varios caminos señalados por hitos que podemos seguir, todos ellos nos llevarán al mismo lugar.
Nosotros en la Brecha de Aspe encontramos algo de nieve, niebla y viento, aún así nos decidimos a seguir con nuestro ascenso, pero a falta de cien metros para la cima nos retiramos porque al no ver ni conocer el camino no sabes si el tramo que nos queda es complicado o no, por lo que decidimos darnos la vuelta y dirigirnos al refugio por el mismo camino donde hemos subido.
En la bajada, en As Planas, las nubes desaparecen durante un pequeño instante y podemos observar el Pico Aspe y el lugar hasta donde hemos llegado.
Una pena no haber podido subir a la cima pero estamos seguros que volveremos a intentarlo, porque pese a que el día no acompaño demasiado el contraste del recorrido nos gusto muchísimo, con árboles llenos de colores al inicio, un pequeño collado con vistas hacia dos barrancos preciosos, una zona karstica preciosa pese a la niebla y nieve al final, que mas se puede pedir...

Un pequeño descanso en el collado (lugar donde coincide con el recorrido de ascenso desde el Refugio de Gabardito) y cogemos el camino de la cara sur del Bisaurin, tras un poco mas de una hora de ascenso continuado desde el collado llegaremos a la cima del Bisaurin, desde donde podremos contemplar unas vistas magnificas de los montes de alrededor (Hiru Erregen Mahaia, Anie, Aguerrí, Castillo de Acher, Midi d’Ossau, Collarada,…).
Nuestra intención era realizar una ruta circular, para ello tras ascender al Bisaurin nos deberíamos de haber dirigido a la Plana Mistresa y desde allí al Refugio de Lizara, pero la nieve acumulada en la ladera norte nos hace desistir en el intento y bajamos por el mismo lugar donde hemos ascendido.
En menos de cuatro horas hemos hecho el recorrido de ida y vuelta y como hoy el tiempo acompaña decidimos hacer una vía ferrata ubicada en las cercanías del Refugio de Lizara, pero esto os lo contare en el siguiente post.
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