Córcega es la cuarta isla más grande del mar mediterráneo con una superficie de 8.680 km2. Los griegos la bautizaron como "Kallisté" ("La más bonita"), y a decir verdad no se confundieron al denominarla de esa manera. Además, a principios del siglo, algunos la habían apodado la isla verde, para diferenciarla de las otras islas mediterráneas, mucho más áridas. En efecto, Córcega, a pesar de su posición meridional y su insolación, es una isla verde.
La isla gracias sus mil kilómetros de costas, de los cuales aproximadamente 300 son de arena fina y en los que se ubican alrededor de 200 playas, Córcega es un sitio soñado para los deportistas náuticos, los submarinistas y otros amantes del mar. Pero, Córcega es igualmente una montaña en el mar, en la cual se pueden practicar la escalada, el senderismo, además de disponer de varias vias ferratas y descenso de barrancos.
Nuestra intención era recorrer parte de la isla Córcega durante cinco días, pero un traspies realizando el GR 20 nos hizo dejar el recorrido a pie y dedicarnos a hacer turismo por Córcega.
Recorrimos la isla en un coche alquilado y mayoritariamente dormimos en camping puesto que el alojamiento en hoteles o similares es muy caro. Con un mapa de la isla y con la información que nos facilitaron en la oficina de turismo de Ajaccio decidimos recorrer la isla en sentido de las agujas del reloj partiendo desde la capital Ajaccio.
Tras visitar el casco antiguo, el puerto antiguo y el mercado de Ajaccio nos dirigimos a ver las Islas Sanguinarias (Iles Sanguinaries), esté es un archipiélago situado en la punta de la Parata y que consta de cuatro islas. De allí nos dirigimos hacia el norte, nos quedamos a dormir en los alrededores de Tiuccia y a la mañana siguiente pudimos disfrutar de la playa solitaria Plage de Liamone. Nos dirigimos hacia Piana para observar Las Calanches (Les Calanches), se trata de unas formaciones graníticas que mudan del naranja al rojo según la hora del día.
En el camino empezaremos a ver algunas de las multitudinarias torres genovesas existente en la isla, una de ellas esta ubicada en el pueblo de Porto, desde el cual podremos observar unas vistas espectaculares del pueblo y del golfo de porto.
Desde el pueblo de Porto, al igual que desde Galería o desde Calvi podremos realizar un recorrido en barco por la Reserva Natural de Scandola, elegido por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad en el año 1983. Se trata de uno de los lugares mas bonitos de toda la isla desde nuestro punto de vista y a decir verdad merece la pena realizar el trayecto en barco.
Desde Porto nos dirigimos hacia el norte y nos paramos en el mirador de Osani para ver Golfo de Porto y el Golfo de Girolata. Tras dormir en Galería nos dirigimos hacia Calvi y en el camino nos paramos en la Península de Revellata en la cual pasamos la tarde dándonos un baño en una pequeña pero preciosa playa.
Calvi con un puerto deportivo en el cual vimos atracados los mejores yates de toda la isla dispone de una playa de mas de cinco kilómetros y con unas aguas transparentes. También se puede visitar la ciudadela con calles estrechas y que desde la cual se puede tener una vista completa de la bahía y del puerto.
Al día siguiente nos dirigimos a Iles Roousse para ver el mercado de las veintiún columnas y contemplar las famosas playas de este sitio turístico. De allí nos dirigimos a la playa d'Ostriconi, una playa ideal para la practica de snorkel por sus aguas cristalinas, desde donde realizamos parte del recorrido de Desierto de Agriates (Desert de Agriates). El recorrido del Desierto de Agriates transcurre entre las playa d'Ostriconi y de l'Ospedale, siendo un recorrido de dos jornadas dada su longitud.
A dormir nos fuimos a Corte, la capital de la isla para los corsos. La ciudad esta construida sobre un pico escarpado dominado por una ciudadela, se encuentra en el corazón del Parque Natural y es el punto de partida de diversas excursiones (nosotros realizamos un recorrido a lo largo de la garganta de Tavignano, que se inicia en Corte y llegamos hasta la pasarela de Russulinu).
Desde Corte nos dirigimos de nuevo a la costa para ver el Cap de Corse, iniciando dicho recorrido en Sant Florent, pasando por Nonza con su torre genovesa muy bien conservada y parando en Centuri para comer langosta en un restaurante del puerto viejo y realizar parte del recorrido del sendero de los aduaneros (este recorrido transcurre mayoritariamente por los acantilados y en diversos momentos tendremos opción de pegarnos un baño).
La vuelta al Cap de Corse la finalizamos en Bastia, ciudad industrial a la cual llegan muchos de los ferrys procedentes de Francia, tiene una ciudadela y al lado de la misma nos llamo la atención muchos edificios que muy mal conservados y que dan a esta ciudad una imagen poco pintoresca. Cerca de la ciudad tendremos una de las playas que mas nos gusto a nosotros de toda la isla, la playa de La Mara, su arena, su longitud, su cercanía a la Reserva Natural de Biguglia, su amanecer,... a nosotros nos encandilo.
Al día siguiente nos dirigimos al sur de la isla para disfrutar de las playas de alrededor de Porto Vecchio, una de las mas conocidas y mas bonitas es la playa de Palombaggia, se encuentran ubicadas en un lugar impresionante y es obligatorio tomarse un baño en este sitio. De Porto Vecchio a Bonifacio no hay mas que 25 kilómetros y en el camino podremos encontrar otra serie de playas muy recomendables como la playa de Rondinara, la playa Balistra, la playa de Maora o la playa Les Tamaris.
Encaramada en la cumbre de unos impresionantes acantilados blancos se encuentra Bonifacio, ciudad con una ciudadela preciosa y un puerto con mucho encanto. Podremos disfrutar de unas vistas impresionantes y desde la ciudadela podremos observar la vecina isla de Cerdeña. Desde Bonifacio podremos coger un barco para visitar la Reserva Natural des Iles Lavezzi.
Para terminar nuestra ruta nos dirigimos hacia el norte y nos paramos en el Site de Roccapina para observar unas vistas preciosas, de allí nos dirigimos a Sarténe que es "la más corsa de las ciudades corsas". A continuación nos dirigimos hacia Propiano y antes de terminar nuestro tour nos fuimos a los Bains de Caldane (baños de agua caliente naturales que nos sirvieron para terminar la ruta muy tranquilos). Y tras los baños nos dirigimos a Ajaccio terminando de esta manera nuestro Tour du Corsica.
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